Hermana Sororita Diana Espino

La hermana sororita Diana Espino perteneciente a la orden de las hermanas de la redención creció en el mundo imperial de Verin, fiel devota del culto al Emperador destacó por encima de las chicas de su generación por su inquebrantable determinación a la hora de cumplir sus deberes, esto la llevó a ser marcada por la orden de las hermanas de la redención como primera candidata para entrar como novicia al servicio del emperador.

Muchos años después de su entrada en la orden y tras un arduo entrenamiento físico y mental llegó a hermana superiora y a dirigir un pequeño grupo de sus hermanas. Al poco tiempo empezó a desarrollar una faceta antes oculta en ella hasta ese momento y que la dejó en una posición delicada. Su total y absoluta intolerancia hacia aquellas de sus hermanas que no cumplían sus deberes para con el emperador de la manera exacta que ella deseaba. Sus castigos crueles y sangrientos se hicieron famosos en la orden y mas de una joven novicia desdichada los sufrió como una ultima agonía.

La orden no podía permitir tal brutalidad pero tampoco podían deshacerse de aquella guerrera infatigable y opto por una tercera opción algo menos convencional, a partir de ese momento no volvería a mandar ningún grupo de hermanas así mismo solo respondería ante la hermana canonesa de la orden como símbolo de aquello le dieron un rosario negro cuyas cuentas quemaban  herían la piel al tocarla y le dieron la orden de rezarlo cada vez que utilizara la violencia con cualquier fin.

Tras aquella decisión la hermana Diana se radicalizó en sus métodos y su fervor hacia el emperador, tal vez fuera la soledad o su rosario negro pero cada año que pasaba sus actos se volvían mas brutales y salvajes para gloria y gracia del emperador. Aquello agradaba a sus superioras en gran manera pero pronto llegaría a un nivel tan elevado que empezaron a sentir que se les escapaba de las manos, así que en nombre del cumplimiénto del deber hacia la eclesarquía y tal vez, solo tal vez por miedo se le envió un informe a un miembro de campo del ordo malleus con la intención de que la juzgara. Aquel hombre con la escusa de comprobar por si mismo la naturaleza de la sororita decidió llevarla consigo para ver de que era capaz, cuando le pidieron explicaciones por su decisión se limitó a sonreir alejándose con el nuevo miembro de su séquito.

Nadie salvo la propia Diana y tal vez el inquisidor que se la llevo para juzgarla saben que ocurrió a partir de aquel momento, solo se sabe que al volver ella años después seguía manifestando una fuerte devoción hacia el emperador, que su furia contra los enemigos del imperio era mas terrible y que portaba un látigo de siete puntas del que salían miles de agujas como espinas de rosas y que cuando lo usa sus enemigos se retuercen entre gritos y llantos, al tiempo que se arrancan trozos de piel y se sacan los ojos sumidos en un sufrimiento inimaginable.

0-1 Hermana sororita Diana Espino 55 puntos

Tipo: élite

	HA	HP	F	R	H	I	A	L	S
Hermana Sororita Diana Espino	4	5	3	3	2	4	2	9	3+

Equipo: La hermana sororita Diana Espino esta equipada con una pistola bólter, el Látigo de la Culpabilidad y el Rosario negro.

Reglas especiales:

• Personaje independiente (no puede incluirse en ninguna escuadra formada por hermanas de batalla)
• Coraje

Rosario negro: Este es un rosario, especialmente realizado para ella, que le recuerda cual es el precio a pagar por la crueldad de los actos que cometa. Siempre reza su rosario antes de entrar en batalla y tras terminar parece que se duplique su perseverancia.

Tira un 1d6 al comienzo de cada turno, con un resultado de 4+ Diana Espino termina de rezar su rosario y pasara a tener 4 ataques el resto de la partida.

Látigo de la culpabilidad: Este látigo de procedencia desconocida afecta a sus víctimas sumiéndolas en una terrible culpabilidad por todos los pecados que hayan cometido.

Cuenta como arma de combate cuerpo a cuerpo. Por cada herida no salvada producida por Diana Espino en combate cuerpo a cuerpo que sufra una miniatura tendrá que superar un chequeo de liderazgo con su propio atributo de liderazgo sin modificadores de ningún tipo, en caso de no superarla perderá todas sus heridas.